Listo, equipo técnico para desarrollar Tren Suburbano

Publicado en el diario La Crisis
http://www.lacrisis.com.mx/trensub230904.htm

Roberto Alcántara Rojas y sus socios del Grupo Toluca que hicieron perder al país cerca de 11 mil millones de dólares producto de los préstamos quirografarios que fueron a dar a la panza del Fobraproa, se anotaron a la licitación para operar el Tren Bala México-Guadalajara y también figuran entre los aspirantes a desarrollar el Tren Suburbano que correría de la estación Buenavista a Huehuetoca, estado de México.
De acuerdo con información de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, ya se encuentra listo el equipo de asesoría técnica para desarrollar la obra por un costo aproximado a los 400 millones de dólares, y entre las empresas que entraron al proceso de licitación se encuentra IAMSA, de los Alcántara Rojas.
En total son seis firmas extranjeras y dos mexicanas. Las transnacionales son Siemens, CAF, Elecnor, Alstom, Bombardier y Mitsui, mientras que las de capital nacional son Ferrosur (propiedad de Carlos Slim), Ferromex (comandada por Germán Larrea) y la del Grupo Toluca.
De acuerdo con información de la dependencia que dirige Pedro Cerisola y Weber, Banobras será la encargada de la situación financiera, la firma suizo-finlandesa Electrowatt tendrá bajo su responsabilidad la parte técnica del proyecto, en el área jurídica los encargados serán los integrantes del despacho encabezado por Ricardo Ríos Ferrer y David Guillén Llerena, todos bajo la coordinación de Felipe Ochoa y asociados.
Pues el grupo de los Alcántara Rojas, que alguna ocasión ofrecieron sus servicios a los políticos priístas a cambio de grandes prebendas como fue convertirlos en banqueros en perjuicio de todos los mexicanos, ahora "ofrecen" los mismos servicios al gobierno panista del que esperan recibir la licitación del Tren Suburbano y ponerse a la vera de lo que se podría considerarse como otro Fobaproa.
En 1992 Roberto Alcántara Rojas, Carlos Mendoza Guadarrama y Rubén Goldberg ofrecieron 125 millones de dólares por la adquisición de lo que era el Banco de Crédito y Servicios (Bancreser, al que posteriormente le cambiaron el nombre por Bancrecer).
Así, al año siguiente, los accionistas mayoritarios pasaron a inscribir su nombre en el flamante consejo de administración del nuevo banco. En letras de bronce estaban los hermanos Roberto, José Carmen Arturo y José Luis Alcántara Rojas, Jesús Alcántara Miranda, Librado Padilla Padilla, Enrique Aranda Flores, Luis Rodrigo González Fuentes, José Haua Afif, Sergio Martínez Álvarez, Javier Miguel Afif, Alejandro Morales Mega, Alejandro Portilla Garceran, Jorge Garcés Cruz, Luis Méndez Jiménez, Arnulfo Padilla Padilla, Rafael Yamín Saade, José Ramón Elizondo Anaya, Enrique Portilla Ibargüengoitia, Héctor Ruiz Guzmán, Gustavo Cárdenas Monroy, Manuel Fernández Hernández, Francisco Javier Gaxiola Ochoa, Rafael Herrera Fernández, Enrique Ríos López, Ricardo Valencia Tejeda, Manuel García Guerra, José G. González Rubio, Alberto López de Nava, Carlos Machorro Camarena, Carlos Mendoza Guadarrama, Eduardo Morales Fillad, Jesús Santana Nava y Ramiro Trevizo Gutiérrez.
La mayoría de las empresas de estos hombres de empresa aparecen como beneficiarios de los créditos reportables, es decir, operaciones nada transparentes, por arriba de los mil 65 millones de dólares que a fines de 2001 se habían traducido en 11 mil millones. Entre las empresas se encuentran Aero Ejecutivo de Alejandro Morales Mega con 366 millones, Compañía Importadora y Exportadora con 247 millones, Joel Álvaro Valenzuela Parra con 172.8 millones, Inmobiliaria Pedrujerrín con 165 millones, Héctor y Arturo Lomelí Villalobos con 151.7 millones, Constructora e Inmobiliaria Praderas del Río con 128 millones, Industria de Madera Las Américas con 116.7 millones, Aluminio Manufactura y Ensamble con 108 millones, Eduardo Zaragoza Fuentes con 111.5 millones, José Manuel Fernández Hernández con 107 millones, y otros.
De manera no desafortunada, sino amañada, en junio de 2001 el IPAB informó que "la acción penal en contra de los presuntos responsables ya prescribió". Aún así, cuando el banco fue intervenido, los Alcántara Rojas y sus socios dijeron que habían perdido durante su administración alrededor de 900 millones de dólares.
Pero en octubre de 2003 el presidente Vicente Fox, otro beneficiario del Fobaproa, rehabilitó al empresario camionero que quebró Bancrecer, se benefició con el Fobaproa y pagó la escolta que ¿cuidó? de Luis Donaldo Colosio en Lomas Taurinas.
Roberto Alcántara dejó hace un par de meses la presidencia de la Cámara Nacional del Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat), mientras que su hermano José Carmen Arturo es diputado federal, integrante de las comisiones de Desarrollo Metropolitano, Hacienda y Crédito Público y Transportes; en tanto José Luis es presidente del Comité Estatal de Financiamiento del PRI en el Estado de México.